Con esta baja en las naftas, la petrolera estatal sigue los pasos de Axion y Shell, que hace unas semanas habían sido las primeras empresas en dar marcha atrás con los últimos aumentos, en línea con la evolución del precio internacional del barril de petróleo.
El argumento que dio el Gobierno para la rebaja del precio de las naftas no sólo es la caída del barril Brent, el que se toma como referencia en la Argentina, sino también la estabilidad cambiaria, más allá del reacomodamiento del dólar de los últimos días.
Por su parte, las petroleras recordaron que este mes será mayor el peso de dos gravámenes a los combustibles, el que se aplica sobre las emisiones de dióxido de carbono y el clásico ITC, ajustable por inflación.
Desde diciembre, ambos impuestos sumarían un peso de casi 25% sobre el valor en surtidor.
De acuerdo con datos oficiales, los despachos de naftas y gasoil cayeron 2,8% en octubre último frente al mismo mes de 2017.
Pero la utilización de nafta Premium descendió en forma muy abrupta, un 28,8%, por los sucesivos aumentos de precios en los surtidores, y esta sería una razón para que la rebaja de precios sea mayor en este combustible.
En un año se pasó de vender 253 mil metros cúbicos a apenas 180 mil.
En el caso de Diésel de mayor calidad, el Grado 3, el descenso en las ventas fue de 6,6% en los últimos 12 meses.
Noviembre había arrancado con subas del 5% en Shell y Axion, pero a la semana debieron achicar el incremento a la mitad porque YPF, que detenta el 56% promedio del mercado, sólo ajustó 2,5% sus productos.