Horas antes de que el Tribunal Oral Federal 2 dé a conocer su veredicto en el juicio por la obra pública, la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner reiteró que será condenada y hasta apuntó contra los medios. “Es una suerte de regalo para Magnetto”, afirmó. También cargó contra la justicia y se comparó con el recientemente electo presidente de Brasil, Lula da Silva.
En declaraciones al diario brasileño Folha de São Paulo, la ex presidenta dio por descontado un veredicto condenatorio el próximo martes 6 de diciembre. “El 7 de diciembre (la sentencia) va a ser publicada en los diarios”, introdujo Cristina.
“Ese día –prosiguió-, el 7D, fue un emblema de nuestro gobierno con la Ley de Medios, que establecía que los dueños de los medios que tenían demasiada concentración mediática debían desinvertir. La tapa de “Cristina condenada” y el 7D van a coincidir. Es una suerte de regalo a (Héctor) Magnetto (CEO del Grupo Clarín)”.
La vicepresidenta insistió en que su condena está escrita desde el 2 de diciembre de 2019, cuando testificó por primera vez en el juicio. “Por razones muy simples”, explicó. Y enumeró: “Primero: todas mis garantías constitucionales fueron violadas. Segundo: todo lo dicho es mentira. Tercero: el juez que investigó este caso (en primera instancia, y decidió enviarlo a juicio) es el mismo (Julián Ercolini) que hace siete u ocho años, ante las mismas acusaciones de la oposición, dijo que no estaba competente (para investigar) y envió el caso al (juzgado) del sur del país”.
En ese punto, Cristina volvió sobre el sobreseimiento que dictó la Justicia de Santa Cruz. “Ese proceso involucró al mismo empresario y exactamente a las mismas 51 obras que ahora se investigan nuevamente”, señaló.
“No, en absoluto”, respondió cuando le preguntaron si el empresario Lázaro Baez, acusado en el juicio por Vialidad, era socio de ella y del ex presidente Néstor Kirchner. “Sos socio –amplió- cuando tenés un contrato de sociedad. Era amigo de Néstor, como otros amigos de negocios que tenía Néstor. Pero no, no”.
“La justicia persigue a líderes como Lula y yo”
En otro pasaje del reportaje, la vicepresidenta habló sobre la investigación del intento de intento de magnicidio en su contra, ocurrido el 1° de septiembre pasado.
Al abordar el tema, renovó su teoría de que detrás de los autores materiales “hay autores intelectuales” que financiaron con 17 millones de pesos “una carpintería que no existe”, en alusión a un giro por ese monto que una firma vinculada a Luis Caputo –ex ministro de Finanzas de Macri- le realizó a Jonathan Morel, líder de Revolución Federal. “Si esto fuera al revés, estaríamos todos presos”, sostuvo.
“Los jueces puestos (Mauricio) Macri lo protegen a él y a quienes quisieron matarme, y no investigan nada de que lo que pasó durante su gobierno”, afirmó.
En el plano político, la titular del Senado dijo que al país “no le va bien” con el Gobierno de Alberto Fernández. Indicó, no obstante, que la situación “no es imputable” a la actual administración, aunque evitó hablar del mandatario.
“¿Cómo puede estar todo bien después de la deuda que contrajimos (bajo el gobierno de Macri)?”, planteó.
“¿Pero, ¿cuál es su responsabilidad?”, indagó la periodista. “No, querida, las cosas no se pueden analizar de esa manera –subrayó la ex presidenta-. Cuando salí del gobierno, en 2015, nuestra deuda en dólares no llegaba al 10%. Recuperamos un país endeudado”.
Consultada sobre si será candidata en 2023, volvió a apelar al misterio: “Yo sí quiero. Había una frase muy emblemática del General Perón en la que decía: ‘Todo en su medida y en armonía’”