El brote de coronavirus que obligó al intendente de Necochea, Arturo Rojas, a dar marcha atrás con la flexibilización de la cuarentena y volver a la fase 1 se propagó en un baby shower clandestino en pleno aislamiento social preventivo y obligatorio.
En este evento se reunieron al menos 30 personas para agasajar a la joven embarazada de Lorenzo -el bebé en camino- asistieron dos de los tres hijos de Paula H., la mujer que conocen como “el caso índice”, se esparció el virus y la ciudad terminó contabilizando 28 casos positivos de COVID-19 y 425 personas en situación de aislamiento.
Entre los contagiados está la embarazada quien dio a luz el jueves a la mañana en el Hospital Municipal Emilio Ferreyra donde la joven se encuentra internada en aislamiento en el sector para pacientes con coronavirus.
Al salir de la sala de parto le hicieron hisopado al recién nacido y se supo que hubo transmisión vertical: Lorenzo nació con COVID-19 y pesó 3,500 kilogramos.
El jefe comunal confirmó que el niño y la madre se encuentran “en buen estado de salud”, y aseguró que por las particularidades del caso, la placenta será analizada a nivel sanitario provincial.
Se trata del segundo caso informado de un bebé nacido con la enfermedad en el país, tras otro registrado en el Hospital Fiorito, de Avellaneda. En este caso el bebé nacido se contagió de su madre asintomática y lo trasladaron al Hospital de Niños de La Plata.
