En un acto que se realizará desde las 11 en la sede de la Unidad Regional II, sita en Ovidio Lagos 5200, el director general Marcelo Villanúa asumirá como nuevo jefe de la policía de la provincia en reemplazo de su par José Luis Amaya, quien había accedido al máximo cargo en la fuerza en agosto de 2016.
El recambio en la policía santafesina se da en medio de una escalada de violencia en la ciudad de Rosario y después de que el ministro de Seguridad, Maximiliano Pullaro, le aceptara el pase a retiro a Amaya, quien cumplió 31 años de servicios en la fuerza.
De esta manera Villanúa dejará la titularidad de la Unidad Regional con asiento en Rosario, la que quedará a cargo del actual subjefe, Claudio Romano, aunque según fuentes extraoficiales eso será por un breve tiempo ya que la idea del gobierno es que ese lugar sea ocupado por el director generla Juan Pablo Bengoechea.
Villanúa ingresó a la fuerza en 1992 y su primer destino fue el de sumariante en la comisaría 1ª de Rosario. Después estuvo cumpliendo funciones en el Comando Radioelétrico, la desaparecida Moralidad Pública, la comisaría 15ª, la Brigada de Investigaciones y las comisarías 23ª y 19ª.
Tras ello fue jefe del Comando Radioeléctrico rosarino, titular de la seccional 1ª ocupó las jefaturas de las Inspecciones de Zonas 3ª, 6ª y 1ª, y titular de la Unidad Regional XVII con asiento en la ciudad de San Lorenzo antes de recalar en la jefatura de la Unidad Regional II.
De bajo perfil y un poco reacio en su relación con la prensa, Villanúa fue destacado en su accionar al frente de la policía rosarina porque “más allá de los últimos 40 días en los cuales la ola de violencia se instaló en la zona sudeste de la ciudad, o los cuatro o cinco meses que hubo con un alto nivel de conflictividad, en sus 28 meses al frente de la fuerza supo ordenar la cadena de mandos en la Unidad”, dijeron voceros del Ministerio de Seguridad.
Fuente: La Capital