El bajo uso de preservativo (según una encuesta de AHF de 2016, entre los adolescentes de 13 a 20 años, sólo el 16,7% dijo usarlo siempre) y nuevas tendencias como el chemsex (fiesta sexual de drogas químicas y alcohol que está llegando a Argentina), refuerzan la necesidad de activar campañas de concientización, educación y difusión sobre el uso del preservativo como el método más eficaz para evitar embarazos no deseados y evitar los riesgos de transmisión de VIH y otras infecciones como sífilis y hepatitis. Según la encuesta 2016 de AHF, el 96% de los nuevos casos diagnosticados con VIH fueron por transmisión sexual, es decir, relaciones sexuales sin preservativo.
Bajo el lema “Forremos la primavera”, la organización AHF Argentina está realizando jornadas de prevención sobre el VIH en distintos puntos del país con entrega de preservativos de manera gratuita, información sobre educación sexual y realizando testeos gratuitos, confidenciales y rápidos de VIH.
En la actualidad, más de 120.000 argentinos/argentinas conviven con el VIH y AHF Argentina continua generando conciencia sobre la importancia de la prevención para reducir la transmisión del virus.
RELEVAMIENTO AHF. Durante 2016, AHF Argentina realizó 30.013 tests de VIH en 14 provincias de todo el país, y efectuó un relevamiento a todas las personas que se testearon. Un 0,9% de los casos resultó reactivo para VIH (272 casos). Uno de los datos más significativos es que el 96% de los nuevos casos diagnosticados fueron por transmisión sexual, es decir, relaciones sexuales sin preservativo. La cifra se condice con los datos del último Boletín sobre VIH- Sida del Ministerio de Salud de la Nación, según el cual se notifican 6.500 nuevos casos por año en todo el país y la principal vía de transmisión del VIH sigue siendo la sexual. En el período 2013- 2015 más del 90% de los varones y mujeres adquirieron el VIH de esa forma.
Otros de los datos relevados por AHF Argentina demostraron que sólo el 14,5% de las personas utilizan siempre el preservativo, mientras que el 65% lo utiliza en algunas oportunidades y el 20,5% reconoció no usarlo nunca. En el caso de los adolescentes, de 13 a 20 años, sólo el 16,7% dijo usarlo siempre.
La mayoría de los tests y casos reactivos para VIH se presentaron en la franja etaria de 25 a 49 años. En el grupo de los varones de esa franja, de 6576 tests realizados, el 1,4% resultó reactivo para el virus. En el grupo de las mujeres, de 7775 pruebas, 0,6% fue reactivo; y en el grupo trans, de 179 pruebas, el 5,8% resultó reactivo. En el grupo etario de 0 a 14 años, de los 359 tests efectuados ninguno resultó reactivo al virus.
A la hora de responder sobre las razones por las que se realizaban las pruebas, 15.630 personas dijeron que fue por sexo sin protección. Un total de 7.356 hombres realizaron el test por dicho motivo y de ellos el 1,4% resultó reactivo para VIH. En el caso de las mujeres, de 8068 que hicieron el test por la misma razón, el 0,6% resultó reactivo y de 206 trans, un 4,4% de los mismos fue reactivo.
NUEVA TENDENCIA GLOBAL: CHEMSEX. El término procede de las palabras en inglés “chemicals” (drogas químicas) y “sex” (sexo). El consumo de drogas tiene como objetivo desinhibirse, aumentar la resistencia y el placer. La sensación de cansancio desaparece por lo que las fiestas pueden durar varios días en los que los participantes no comen ni duermen. Es furor en la comunidad gay de Europa y ya hay quienes afirman que se están afianzando como una tendencia en la Argentina.
En estas celebraciones privadas en las que se consumen drogas químicas durante horas o días produciendo serios peligros para la salud. Los especialistas coinciden en que se trata de una práctica riesgosa no sólo porque puede derivar en sobredosis, adicción sino también por el potencial aumento de contraer Infecciones de Transmisión Sexual (ITS) como VIH, sífilis, gonorrea y hepatitis. Esto último se debe a que muchos al perder la percepción del riesgo como consecuencia de las drogas, dejan de usar preservativo. Tanto es así que el chemsex se ha convertido en un problema de salud pública en varios países, como en Reino Unido, donde cerca de 7 de cada 10 personas que acuden a servicios de asesoramiento para colectivos LGTB reconocieron haber practicado sexo recurriendo a sustancias como metanfetamina o éxtasis líquido.
Al respecto, Miguel Pedrola de AHF Argentina, aseguró: “Es importante concientizar sobre el uso del preservativo ya que es el método más eficaz para reducir la transmisión del VIH y de otras de infecciones sexuales como la gonorrea, la clamidia, las hepatitis virales, la sífilis, el herpes genital o el Virus del Papiloma Humano (VPH) y el virus Zika”.
La utilización del preservativo es crucial para lograr un enfoque integral, eficaz y sostenible de la prevención del VIH y otras Infecciones de Transmisión Sexual (ITS). El desarrollo de nuevas tecnologías de prevención, como las vacunas contra el VIH y los microbicidas, continúa avanzando pero los preservativos seguirán siendo por muchos años el principal medio de prevención.
Es necesario entender que siempre que haya penetración (oral, anal o vaginal) hay riesgo de transmisión en diversos grados pero al usar preservativo esa probabilidad es del 0%. Más allá de esto, el uso del preservativo es la vía más segura para tener relaciones sexuales y evitar además otras infecciones de transmisión sexual.