Santiago Marsili (43) es artesano platero, en Funes, Santa Fe, y a partir del triunfo de Javier Milei, en el balotaje, se embarcó en una gran tarea: hacer un bastón presidencial.
Es criador de caballos tiene la expectativa de que @JMilei el líder de La Libertad Avanza [LLA] tome el mando el próximo 10 de diciembre con el bastón que comenzó a trabajar a principios de septiembre pasado, antes de las elecciones generales.
“Esto fue un proyecto, un desafío personal, con la idea de ofrecérselo a Milei. Ya se lo mandamos por fotos, pero vamos a ver si lo acepta. Hay que esperar a ver si le interesa”, explicó Marsili.
El diseño lo eligió pensando en el león con el que se identifica el líder de LLA. “Se hizo pensando en la simbología del león y parte de las estrofas del Himno nacional, que son tan fuerte para nosotros, pero también por lo que representan para él”, puntualizó.
Históricamente, en la Argentina, Juan Carlos Pallarols es el artesano encargado de realizar en plata los bastones presidenciales. En 2015 esa hegemonía se rompió cuando Mauricio Macri decidió tomar el mando con el bastón que diseñó Damián Tessore, un orfebre de Mercedes, provincia de Buenos Aires, pese a que había hecho uno para el expresidente. En su momento, Tessore, contó que confeccionó el bastón mucho tiempo antes y lo entregó sin tener novedad hasta el momento de la ceremonia donde Macri eligió los atributos presidenciales que él había elaborado.
“La idea me la propusieron dos amigos que me dijeron: lo tenés que hacer vos. Ellos [sus amigos] lo ven como algo raro, porque, por ejemplo, plateros [su oficio] no hay acá.
Estoy solo, por lo menos, en Funes. No hay otro que se dedique a hacer platería”, explicó entusiasmado. A partir de la motivación que recibió de sus amigos, le propuso la idea a otro productor, Juan Felix Rossetti, para que lo ayude a cubrir parte de los costos de la iniciativa.
“En el interior nosotros vemos lejana la posibilidad de hacerlo, pero Rossetti me dijo: metele que de alguna manera te lo financio. Él se entusiasmó en seguida”, contó. Los costos por el material para hacer el bastón ascienden a los US$1000, sin contar con la mano de obra en la que trabaja desde el 4 de septiembre pasado, con una férrea idea de que el líder libertario asumiría el mando. Los materiales que se usan para hacer este atributo presidencial son plata, oro y la estructura es de lapacho.
El oriundo de El Socorro, provincia de Buenos Aires, contó que participa activamente en el comité de tradición de la Sociedad Rural Argentina (SRA), y participa del Fortín Pergamino, en Pergamino. “Me dedico a todo lo relacionado con la tradición [argentina]. Así estoy relacionado con el tema de caballos criollos”, explicó.
En un campo familiar desarrolla todo lo relacionado con la raza y su oficio. Estudió ciencias económicas y administración rural, y a partir de su profesión conoció a Rossetti, a quien le administró un campo ganadero hasta 2014, antes de dedicarse a la platería artesanal, su nueva forma de vida.
“La platería me gusta. Nuestra cultura criolla es algo que me apasiona, es una manera de continuar. Antes trabajaba en cuero crudo, y después arranqué con la platería. Una cosa va llevando a la otra. Estoy muchas horas metido haciendo esto acá adentro. Me gusta dedicarme a la tradición”, puntualizó. La platería criolla de campaña, como estribos, espuelas o cuchillos, los exhibe en diferentes muestras de la provincia, pero principalmente en la Exposición Rural de Palermo.
Por último, Marsili dice que se distingue del oficio de un orfebre, quien en realidad hace también otro tipo de platería, por ejemplo, la religiosa y civil. “Lo mío es más cultura criolla”.