Capacitación en Manipulación Segura y Saludable de Alimentos en Funes
Los funenses comienzan a apropiarse de las nuevas arterias realizadas en la mayoría de los barrios por parte del municipio local. La ciudad contaba en diciembre de 2019 con 330 calles que tenían pavimento y desde la gestión del Intendente Rolvider Santacroce aseguran que ya llevan 850 arterias más pavimentadas. En un plan impensado por otros gobernantes funenses se siguen realizando trabajos en diferentes barrios.
Quienes han vivido en calle de ripio saben de la importancia de contar con el asfalto, no solo en días de lluvia, sino durante todo el año. El pavimento no solo le cambia la cara al barrio o la ciudad, sino que genera mejores condiciones de vida para los habitantes.
En Funes se realizó una planificación respecto a la circulación de los vehículos y así se llegó a la conclusión de las arterias más importantes que se debían mejorar y conectar por el excesivo tránsito vehicular que deterioraba hasta ese momento las viejas calles de tierra o ripio.
Teniendo en cuenta esta información desde la Secretaría de Obras Públicas se priorizó la pavimentación del Boulevares y calles que conectaban barrios con los diferentes ingresos y egresos de la ciudad, que a su vez interconectan instituciones educativas, centros de salud, clubes, comercios y lugares de esparcimiento entre otros sitios de concurrencia masiva sin que los habitantes tengan que desplazarse sobre el barro.
La pavimentación trae cambios decisivos para la movilidad de los vecinos, no van a tener problemas los días de lluvia para entrar y salir de su casa. Este avance va a permitir el ingreso sin dificultades a los servicios de emergencias (ambulancias, bomberos, policía). Y así, entre otras cosas, los chicos llegarán al colegio sin barro en sus zapatillas o en sus guardapolvos.
El pavimento permite la accesibilidad y movilidad en dichas zonas, lo cual trae beneficios como un mayor flujo de mercaderías para comercios, visitantes, la práctica de nuevas actividades y la generación de más recursos económicos.
Además, desde la Gestión afirmaron que se trabaja constantemente en la reconversión lumínica con luces led, que ya se llevó a cabo en numerosas calles recuperadas.
De esta manera, en un proceso que lleva 3 años y medio, la ciudad dejó de tener la mayoría de sus calles íntegramente de tierra y cuentan con algún tipo de intervención en pos de un mejoramiento vial históricamente reclamado por vecinos de diferentes barrios.
En días de lluvia, las dificultades ya no siguen presentándose, lo que no genera malestar y pedidos de los habitantes de esas zonas de la ciudad.
“Se trabajó con una planificación para atender los reclamos de los vecinos, y así vamos a seguir haciéndolo, tenemos en cuenta cuáles son los puntos con algunas dificultades para ir solucionándolas en el menor tiempo posible”, como lo hemos venido haciendo”, afirmó Santacroce.