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Una muy extraña conducta de la diputada Alejandra Rodenas fue denunciada en un programa de televisión de Rosario: la legisladora y ex jueza habría llegado a una isla de Victoria, en Entre Ríos, mientras se hacía un allanamiento a una lujosa casa del delta aduciendo primero que era suya y luego que iba a alquilarla para las fiestas. Además estaba acompañada de un abogado ligado al narcotráfico, según el informe que presentó “Zona Crítica”.
El hecho habría sucedido hace 15 días, mientras Prefectura allanaba una propiedad atribuida a Esteban Alvarado, quien está acusado de haber matado al prestamista Lucio Maldonado el 14 de noviembre en Circunvalación y Oroño, en Rosario. De repente, los efectivos de seguridad habrían visto con sorpresa la llegada de una lancha en la que estaba Rodenas y el abogado Paul Krupnik. Según la versión policial, la diputada dijo que la propiedad era suya, pero luego cambió la respuesta y señaló que quería alquilarla para las fiestas. “Todo quedó plasmado en el acta”, aclararon en “Zona Crítica”.
Cuando la ex jueza llegó al lugar, Prefectura llevaba apenas cinco minutos de trabajo. Habían llegado ahí luego de que los investigadores encontraran fotos de una casa con una vegetación única: siguieron pistas y llegaron hasta esa paradisíaca isla.
“Esta es mi casa, por qué allanan, yo la compre”, señaló la diputada según el programa de televisión rosarino. Sin embargo, siempre según el relato de los periodistas, cuando supo que la orden venía del MPA y que la causa era por el crimen de Maldonado cambió su relato. “Primero dijo que era de ella, luego que se la habían ofrecido y terminó diciendo que quería alquilarla para las fiestas”, señaló una fuente de la investigación.
Krupnik, el abogado que la acompañaba en la lancha, es a su vez asesor letrado de varios “pesos pesados” de la Provincia, entre los que está Alvarado, quien recuperó la libertad hace un año. Había estado detenido por robar coches de alta gama y “cortarlos” para la venta.
Como ex jueza, Rodenas había intervenido en una causa donde Alvarado está sospechado como presunto homicida. Fue en el 2013, cuando Luis Medina y su novia modelo de 23 años fueron acribillados a balazos. “Según un informe de inteligencia elaborado por la TOE, a pedido de la jueza, se señala que una de las hipótesis del crimen podría haber sido una deuda que tenía Alvarado con Medina y que éste último para apurar el cobro apretó a la familia del entonces preso. Como venganza, siempre según ésa conjetura, Medina apagó su vida de forma violenta el 29 diciembre de 2013”, indicaron en Zona Crítica.
Otra vez, los nombres de Alvarado y Rodenas vuelven a cruzarse. Aunque esta vez no en la Justicia, sino en una paradisíaca isla de Victoria, frente a Rosario.
Fuente: Nexo Diario