En un galpón en Empalme Graneros se encontraron 1.658 kilogramos de cocaína en agosto pasado.
Agentes de la División Operaciones federales detuvieron en Emiratos Árabes Unidos a un ciudadano colombiano sobre el cual pesaba un pedido de captura internacional, acusado de haber tenido en un galpón de Rosario más de 1.600 kilos de cocaína lista para ser exportada a Dubai, que se suman unos 1.400 kilos que salieron de la Terminal Puerto Rosario y fueron incautados en el exterior.
El detenido, Jaime Londoño Rojas, de 55 años, quedó a disposición del Juzgado Federal de Campana a cargo de Adrián González Charvay acusado de haber tenido en un galpón de Rosario más de 1.600 kilos de cocaína lista para ser exportada a Dubai, que se suman unos 1.400 kilos que salieron de la Terminal Puerto Rosario y fueron incautados en el exterior
Las investigaciones comenzaron en agosto, cuando los agentes federales secuestraron 1.658 kilogramos de cocaína en un galpón en Empalme Graneros, lista para ser exportada a la ciudad de Dubai, donde se realizaría el Mundial de fútbol.
A partir de las detenciones realizadas a la organización narcocriminal que operaba en territorio argentino, los efectivos establecieron que en entre mayo y julio pasados se encontraba el alto jefe colombiano —sobre quien pesaba un pedido de captura de Interpol— coordinando las actividades ilícitas con la rama argentina para luego retornar a su país de origen.
Los efectivos lograron detectar que el imputado se encontraría en los Emiratos Árabes Unidos, logrando apresarlo en la capital, Abu Dabi.
El detenido, Jaime Londoño Rojas, de 55 años, quedó a disposición del Juzgado Federal de Campana a cargo de Adrián González Charvay.
Jaime Londoño Rojas, detenido en Abu Dabi.
Londoño Rojas sería uno de los tres colombianos que comandaban el envío de 1.658 kilogramos de cocaína de Rosario a Dubai, secuestrado por la Policía Federal en un galpón de Génova al 2400 el pasado 26 de agosto.
Se sospechaba que otro cargamento similar, que salió de la terminal rosarina y fue secuestrado en los puertos de Santos y Rotterdam tenía el mismo destino y pertenecía a la misma organización internacional. Días después se decomisaron en el puerto de Santos (Brasil) y Roterdam (Países Bajos) aproximadamente 1.400 kilos de cocaína que partieron de Rosario de manera ilegal. La Justicia cree que esos envíos respondían a la misma organización, que tiene entre sus líderes a Londoño Rojas, ahora apresado en Abu Dabi.
Los investigadores sospechan que Londoño Rojas y otro de los cabecillas de la organización, Álvaro Ramírez Duque, estuvieron en un momento en la provincia de Santa Fe para hacerse cargo del envío del cargamento a Europa.
La droga incautada en Santos y Roterdam fue hallada en bolsos colocados dentro de cargamentos de maní. Desde el puerto brasileño (donde interceptaron 568 kilos de cocaína) indicaron que se identificaron “volúmenes extraños superpuestos a la carga ílicita de maní y que estaban acondicionados en varios paquetes con logos que fueron identificados como Supreme y Louis Vuitton”.
Fuentes de la pesquisa precisaron que la carga original había partido desde General Deheza (Córdoba), pero fue “contaminada” en Rosario. Eso quiere decir que la cocaína se introdujo en el muelle local.
Imputados
En días posteriores al hallazgo de la droga fue detenido por su rol de administrador de la operación José Damián “Tano” Sofía, mencionado en varias causas en la provincia de Buenos Aires e investigado como presunto autor de amenazas contra la jueza federal de San Isidro Sandra Arroyo Salgado años atrás. Luego se sumaron otros ocho imputados que, de acuerdo a la pesquisa, integraban una organización internacional que planeaba enviar a España y Dubai el cargamento disimulado en bolsones de alimento balanceado.
De la investigación se desprende que la cocaína iba a ser exportada mediante una empresa conformada hace poco más de un año con el fin de realizar envíos de estupefacientes a Europa en cargamentos de pellets, un alimento balanceado realizado a base de maíz y fabricado por una cerealera cercana a Bahía Blanca, cuyos dueños son poseedores de un depósito de grandes dimensiones en la ciudad cordobesa de Villa María.
La droga estaba almacenada en el galpón de Empalme Graneros empaquetada con un papel con el logo de la marca Louis Vuitton y distribuida en 1.535 panes ocultos en 19 bolsones de 1.250 kilos de alimento balanceado. Esos bolsones iban a ser intercalados en el cargamento total de 150 toneladas que ya había sido comprado por una empresa de España implicada en la maniobra.